EL ROCASA DICE ADIÓS AL 2023 CON UNA AMARGA DERROTA ESTE VIERNES ANTE EL AULA VALLADOLID (23-33). LAS GRANCANARIAS FUERON VÍCTIMAS DE SU PRIMERA MITAD. A PESAR DEL ESFUERZO DEL SEGUNDO TIEMPO.

EL EQUIPO NO LOGRÓ VOLVER A ENTRAR EN EL PARTIDO ANTE UN EQUIPO MUY SÓLIDO QUE DEMOSTRÓ POR QUÉ ES CANDIDATO AL TÍTULO.

El Aula Valladolid salió al partido muy fuerte y marcó distancias demasiado pronto. Apenas se llevaban tres minutos disputados y el conjunto pucelano ya vencía por 0-4. Un lastre muy pesado que condicionaría el resto del choque, a pesar de que el Rocasa llegaría a igualar la contienda minutos más tarde.

Iñaki Ániz se vió forzado a pedir su primer tiempo muerto demasiado pronto para parar la sangría. Sus instrucciones parecieron surtir efecto. Lopes y Terzic tomaron el mando de las acciones ofensivas y pusieron a su equipo a funcionar, con un juego más veloz y efectivo en ataque que conseguía atravesar la sólida defensa visitante. Mela Falcón rubricaba la reacción de su equipo con un 6-6 que devolvía la ilusión a la parroquia local.

Pero las vallisoletanas reaccionaron con la igualada. Su maquinaria se puso de nuevo a funcionar y con un parcial de 1-5, Caja Rural devolvía la distancia de cuatro goles al marcador. Esta nueva ventaja sería a la postre definitiva para el partido, aún quedando parte del primer tiempo y toda la segunda mitad. 

Las visitantes eran demoledoras por el carril central, gracias a la potencia de sus pivotes, a las que la defensa teldense no lograba detener. En ataque, el Rocasa no se encontraba cómodo, estancándose incluso en ocho tantos durante diez minutos. Así se fueron ampliando las distancias hasta el 10-18 con el que se llegó al descanso.

Lejos de reducir distancias, el Rocasa encajó otros dos tantos en apenas un minuto para situar su desventaja hasta los diez goles en el inicio de la segunda parte. Ahí el partido entró en un bucle que duraría hasta el pitido final. Las distancias se movían entre los nueve y once goles. Nunca por debajo ni por encima de ese arco.

Y eso que el Rocasa lo intentó. Hubo rotaciones. Lulu Guerra continuó bajo palos en el segundo tiempo tras su reaparición al final del período anterior. Incluso Sabina Mínguez, hoy tercera portera, tuvo tiempo para detener un lanzamiento de siete metros. Jugadoras con menos minutos ocuparon el protagonismo.

De entre todos los nombres propios, uno sobresalió en las filas de Iñaki Ániz. Inédita en la primera mitad, Eider Poles imprimió carácter a su equipo en defensa y en ataque. No fue, sin embargo, suficiente para volver a entrar en el partido. El Aula Valladolid jamás bajó revoluciones y mantuvo a raya cualquier conato de reacción local.

FICHA TÉCNICA:

23-ROCASA GRAN CANARIA 

Siete inicial: Silvia Navarro (portera), Melania Falcón (5), Jelena Terzic (3), Jhennifer Lopes (2), Marta Siñol (1), Martina Lang, María Zaldúa (3). 

También jugaron: Sabina Minguez (portera), Delfina Ojea (1), Arinegua Pérez (1), Larissa Da Silva (1), Lourdes Guerra (portera), Rebeca López (3), María Cobo, Eider Poles (3), Daniela Moreno.

Exclusiones: María Zaldúa (08:34), María Zaldúa (22:04), Jelena Terzic (36:29), María Zaldúa (46:26)

33-CAJA RURAL AULA VALLADOLID

Siete inicial: Carmen Sanz (portera), Jimena Laguna (4), Inoa Lucio (1), María Prieto O’ Mullony (7), Teresa Álvarez (1), Marcela Arounian (4), Amaia González (5).

También jugaron: Elba Álvarez (1), Laura Bazco, Alicia Robles (portera), Lorena Tellez (2), Irene Botella (4), María Antón, Martina Romero (3), Savina Bergara ,Claudia Moreno (1)

Exclusiones: Jimena Laguna (45:20)

PARCIALES: 2-5, 6-6,7-11, 8-14, 8-16, 10-18, 12-22,14-24, 16-27, 18-28, 20-30, 23-33. 

ÁRBITROS: Miquel Florenza Virgili, Jordi Ausas Busquets

Partido correspondiente a la jornada 13º de la Liga Guerreras Iberdrola, celebrado en el Pabellón Insular Antonio Moreno (Gran Canaria) ante 350 espectadores.