EL TELDEPORTIVO B SUMÓ UNA NUEVA VICTORIA FRENTE AL AVILASALA.

LAS JUGADORAS ISLEÑAS TUVIERON EL DOMINIO DEL PARTIDO SOBRE EL PARQUET PERO NO LO REFRENDARON EN EL LUMINOSO.

TELDEPORTIVO B 2 AVILASALA 1

Las peninsulares se metieron en el choque en el tramo final de la segunda parte y dispusieron de sus ocasiones para haberse llevado algo de Gran Canaria. Sonia y Cori fueron las autoras de los goles locales, mientras que Almendro hizo el de las visitantes.

El inicio de las teldenses fue arrollador. En tres segundos ya habían disparado con peligro y en menos de treinta anotaron su primer gol. Sonia se aprovechó de una jugada rápida que descolocó a la defensa visitante y la dejó sola frente a la portera rival. No perdonó.

El tanto las invitó a seguir en la misma línea y anularon a su rival. Dispusieron de nuevas ocasiones, no tan claras, pero les pudo la ansiedad. Errores de imprecisión y en la definición evitaron que el luminoso siguiera moviéndose.

Las peninsulares poco a poco se encontraron su sitio en defensa. Lograron que las isleñas no llegaran con peligro pero no terminaba de atacar con peligro.

Las locales se cargaron de faltas a cinco minutos del descanso y se abrió un nuevo partido. El Avilasala jugó más arriba buscando los diez metros y lo logró. Un lanzamiento que se fue al palo y con el que casi concluyó la primera mitad.

En la reanudación, el Gran Canaria Teldeportivo siguió teniendo la posesión del esférico pero contemporizó demasiado. Sus ataque no creaban peligro y las visitantes se crecieron y creyeron en sus posibilidades.

Sin haber tenido una ocasión clara, Almendro empató el choque en el minuto 29 al aprovecharse de un rechace en una falta lejana.

Las tablas en el marcador también sirvieron para igualar fuerzas sobre el parquet. Los ataques dejaron de tener tantos movimientos y se buscaba con más verticalidad la puerta contraria.

Andrea y Yaneisi tuvieron las más claras por parte isleña, mientras que Patri la tuvo por las peninsulares.

A cinco minutos de la conclusión las locales pidieron tiempo y atacaron de cinco con Andrea como falsa portera. Les salió bien. Movieron con desbordes, tuvieron sus ocasiones y Cori aprovechó una de ellas para ponerse por delante nuevamente en el marcador.

Le tocaba el turno al AvilaSala de atacar de cinco. Eso sí, con menos tiempo de creación. Sus movimientos fueron más rápidos pero no desbordaban ni abrían huecos.

El último minuto se unió la desesperación de ambos conjuntos por los puntos en juego. Ni control, ni juego, ni despejes en condiciones. Los palos y la falta de acierto en disparos a puerta vacía fueron la tónica de los últimos compases para que el pitido final dejará los puntos en Gran Canaria.